jueves, 29 de mayo de 2008

12 carreras en el ojo del huracán

De diariodeavisos.com: http://www.diariodeavisos.com/diariodeavisos/content/307224/

La Universidad de La Laguna, inmersa en este inminente proceso, ha comenzado a dejar entrever algunos de los riesgos que conlleva esta adaptación: la institución puede perder en el camino hasta una docena de carreras. Las cifras de alumnado ponen en el ojo del huracán la viabilidad de unas enseñanzas que van desde las Humanidades hasta las Ciencias. Dos filologías, Geografía, Historia del Arte, cuatro estudios de Náutica, Filosofía, Ciencias y Técnicas y Estadísticas y Ciencia y Tecnología de los Alimentos se han convertido en los protagonistas de una posible criba que no acontecerá hasta el curso 2010/2011.

El número de alumnado -en todas ellas menor de 25- supone uno de los criterios fundamentales para la sostenibilidad de estos estudios. El Gobierno regional ha redactado, "con el apoyo de las dos universidades canarias", un decreto que, aunque aún no se ha aprobado, ya enumera requisitos tan delicados como éste. No obstante, el texto elaborado responde a las directrices que marca la Convergencia Europea y que el Ministerio de Educación se encarga de fomentar por toda la geografía española. Además, este decálogo de exigencias ya fue aprobado por el Consejo Universitario del Archipiélago. Según el Ejecutivo, "este criterio responde a la necesidad de crear las condiciones adecuadas para el aprendizaje de los estudiantes y al objetivo de eficiencia en el uso de los recursos públicos".


¿Y de que se quejan?. La Universidad de La Laguna lleva años languideciendo con carreras sin demanda que consumen recursos de la universidad y hacen que baje más, si aún cabe su escasa calidad (al mismo nivel que las privadas de ''compra de estudios universitarios'', léase Europea de Madrid, Alfonso X, etc., que curiosamente alcanzan altas cotas de popularidad en Canarias cuando son defenestradas en el resto de España). Ojalá que esta eliminación de carreras provoque una ingente liberación de recursos que se puedan reinvertir en carreras con mayor demanda por parte del alumnado y del mercado laboral. Quien se queje es que es tonto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Completamente de acuerdo con la conclusión final acerca de la pérdida desorbitada de recursos públicos. Un saludo